Avanzo y media dormida me detengo frente al espejo, ese espejo grande y antiguo que tantas veces reflejó la imagen de mi abuela, su hermosa cara, su sonrisa, su delicado cuerpo, más de algún moretón y su tristeza vertida en mil lágrimas.
Mi espejo me lleva a su época y distingo los colores del pasado, la ropa, sus diseños. Despierta mi memoria y la evoco, mezcla de recuerdos olvidados y fotografias en blanco y negro repintadas en sepia por el paso de los años y vuelve mi dama del tiempo, con los ojos dormidos y su sonrisa amable, enamorada del único hombre que llenó su vida y que sin saberlo secó sus lágrimas y apagó su pena, su Arturito fue sin lugar a dudas, su tesoro, su único gran amor y de paso lo único realmente valioso que mi abuelo le dió.
Me miro en el espejo y devuelvo la vida a mi dama antigua, la recuerdo con respeto, con eterno y profundo cariño, con la nostálgia de no haberla conocido más, pero a cambio me dejó su Quilacoya, mi pedazo de Edén y mi añoso espejo con el que puedo traer a la memoria a mi antigua dama del tiempo.
Poly, querida amiga, tú debes editar tus blogueos, no puedes dejar a nadie sin la oportunidad de leer tu pluma, la calidad de tu escritura y la claridad de tus pensamientos no pueden quedar sólo en estas páginas, deben servir de guía a quienes navegan por la vida sin una estrella que los ilumine.
ResponderEliminarq pena q mi bisabuelo le pege a mi bisabuela :'(
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